Lo que no está claro es si ahora podríamos intentar serlo.
Sé que los imposibles también existen. Unos imposibles que un día hicieron que mi cabeza saliera de mi cuerpo y no podría hacer razonar ninguno de mis sentimientos. Hoy llegan de nuevo a mi, con tu voz por delante haciendo que mis recuerdos florezcan desde un sitio que parecía ya enterrado.
La vida crece entre los matices y últimamente hay demasiados alrededor mío como para seguir intentando dejarlos a un lado o hacer que no los veo.
Quizás me quedó grande la situación, incluso ahora. Quién sabe..
Quizás la reacción, quizás el pensamiento, quizás todo esto no haga más que perderme un poco más. Has aparecido de nuevo, y no puedo evitar ahogarme en el recuerdo.
A lo mejor mañana no, pero hoy me encantaría mirarte unos segundos, y sentir que vuelves a ser tú.. y por qué no, sentir que volvemos a ser tu y yo.
Ahora lo veo distinto, diferente, raro, extraño, tonto y algo cínico.
¿Darlo todo por perdido? Ni que fuera un instinto..
Melancolía: forma bonita de estar triste.
ResponderEliminarYo he asumido que siempre viviré un poco anclada en el número 13...
http://www.youtube.com/watch?v=1MndsmRIcO0
Hablamos