Que atonte más tonto.!

Y después de "x" meses, "x" semanas, "x" dias sin ni siquiera acordarse de que ella existía..
Él canta, ella no está.
Cuando parece que ya no va a aparecer, ella llega, tarde, pero llega.
Baja las escaleras mirándolo, lo ve más incréible que nunca. Sabe que no se debería sentir así, pero no puede evitarlo, es lo que habia estado esperando ver desde el primer día que lo conoció (Aquel día..)
Parece que todo se paraliza y la mirada atontada de ella no puede pasar desapercibida. Él está concentrado, mirando la guitarra frente a la atenta mirada de bastante gente que lo observa y admiran lo que hace. De repente, él despega esa mirada de la guitarra y la mira, sólo a ella. Es como si un foco estuviera enfocándola, pero no es asi, simplemente ha sido.. otra casualidad de esas a las que están acostumbrados. Él sabe que ha llegado, y sonrie.. sólo sonríe.

Una vez ya terminado el "concierto" ella se marcha, sin decir nada, solo quedándose con esa mirada y la sensación de que ha llegado tarde, no ha podido escuchar la canción que quería haberlo oído cantar hace tantos meses..
Pero no sería la última vez que se verían aquella noche. Unas horas más tarde, ya cada uno con sus amigos y sin mediar todavía palabra se encuentran. Un metro los separaba de distancia fisica, la psiquica no puedo medirla exactamente, quizás bastante más que la física.

Y comienza el juego...
Él la mira, ella lo mira, sonríen y quitan la mirada..
pero al segundo él vuelve a mirar, y ella lo mira, y se acerca, y le dice una tonteria "que no sabes cantar, no intentes cantar esto que suena.."
y él se rie, y ella se va, y él se le acerca y le dice otra tonteria "deja de bailar a lo andaluz (somos los barrieros) porque no sabes.."
y ella pone caras de indignación divertida y vuelven a reirse,
y vuelven a.. a lo de antes joder, a lo de antes.
Al final de la noche la distancia física puede que no se sepa cual sea, pero la psiquica.. puede que sea menor.